Diana Navarro

20 de abril de 2016

Urge

Mirarte a los ojos por las mañanas y llevarte el café.
Darte el lado más largo de mis sábanas para cubrirte de la cabeza a los pies.
Llevarte flores y algunas noches serenata.
Escribirte poemas en hojas de papel.

Todo eso me urge
me quema cada poro;
me inflama el corazón
y la piel.

Urge que entiendas
que te sepas mi necesidad.
Y que de tu pecho salga un
"yo también te quiero igual".

Deja de ser deseo
pasión
necedad.
Me urge que seas real.