Diana Navarro

16 de mayo de 2018

Pendiete

Te debo todas las lunas que me han visto sin ti por las noches
en mi ventana,
su luz y el sol de mis mañanas.
Esas, donde me levanto y camino sola
porque no me acompañas;
sin mapa,
solo con las ganas que me sobran
pero que me alcanzan para buscarte entre las gentes extrañas.
Solo para decirte cuánto te he extrañado,
cuánta falta le haces a mi cuerpo,
que si avanzo me tropiezo,
que hasta el planeta cambió de rotación.
Porque tengo pendiente una carta,
una sonrisa y un beso;
un abrazo tan fuerte que me haga latir de nuevo.
Y una vida completa
donde mi vientre y tu pecho sean uno solo,
una donde hasta el amor sienta celos de todo mi amor.